jueves, 25 de diciembre de 2014

EL ÁGUILA DE LOS SUEÑOS


Una hora después, todos los animales estaban reunidos en el borde de la gran cascada para tratar de resolver el tremendo problema que a todos preocupaba.

—Amigos —comenzó Pepito—, ya sabéis por qué estamos aquí. Debemos expulsar entre todos a esa bruja de nuestro bosque. Si nos unimos, podremos vencerla.
—Lo lograremos —continuó el conejo Equino— si las abejas la atacan en la cara para que sus manos queden libres, las águilas tiran de sus trenzas, el puercoespín le pincha sus pies, los pájaros la pican y asustan con sus graznidos y las cabras monteses la empujan hasta el precipicio de la cascada…

Pepito lo interrumpió:
—… y las mariposas deberían ponerse delante para que la bruja no pueda ver dónde pisa.

No había tiempo ni era la ocasión para un debate, así que todos estuvieron de acuerdo en esperar el momento oportuno para comenzar el ataque.

EL ÁGUILA DE LOS SUELOS



Los abuelos son sabios. y los nietos aprende de ellos......

—Abuelo, ¿por qué les das las gracias a las plantas cada día?

—Mi querido Lian, la tierra nos da sus alimentos y hay que estar agradecidos. La tierra nos da las patatas, verduras, zanahorias…, todos los alimentos que necesitamos. Los árboles nos dan sus frutos: el manzano las manzanas, el peral las peras, el melocotonero los melocotones…

—¿Por qué siempre les das las gracias a todos y a todas las cosas?

—Cada día le ...doy las gracias al sol porque nos da su luz, de él recibimos vida y calor. Y le doy las gracias a la noche porque nos ofrece el descanso. Al cielo, por su belleza y su color azul y también porque nos ofrece miles de estrellas pequeñas, bellas y brillantes. Y a la lluvia que riega nuestros campos, para que las plantas crezcan.

—¿Y por qué les das las gracias y hablas con los animales?
—Lian, querido nieto: les doy las gracias a las gallinas porque nos dan los huevos, a las cabras porque nos dan su leche, a los pajarillos por alegrar mi corazón con sus alegres cantos, a las águilas por su vuelo suave y majestuoso. Y a las flores porque alegran mi vista cansada.